VIVO

Sales de casa, no importa el día que haga, si llueve, si hace sol, frio o viento.

En tu cabeza solo esta fija una idea. Llegas al garaje y está allí, las hay mejores y peores pero esta es tu moto, la que te has tenido que currar tanto tiempo y en mi caso lo único que tengo en propiedad.

Te pones el casco, te abrochas la chupa y giras la llave del contacto, no la habías arrancado desde ayer y cuando vas a pulsar el encendido ya imaginas como sonara, aciertas.

Te subes y engranas primera, debes ir con cuidado de no patinar en el liso pavimento del garaje, menudo membrillo el que ideo esto.

Todo funciona, en la penumbra de este cementerio de latas puedes disfrutar de la visión que tantas veces has tenido, la luz del cuadro ilumina el tacómetro y el cuenta, se acaba de apagar la luz verde del neutral, todo está listo y arrancas, te acercas a la puerta de salida y pulsas el botón de apertura.

Siempre, indefectiblemente, el dia esta mucho mejor cuando lo ves desde encima de tu moto.

Sales a la calle y vas engranando velocidades entre los coches, hoy decidiste ponerte el casco jet y todos los sonidos de la ciudad, los olores y las sensaciones te inundan, pero hoy no tienes ganas de esto, hoy buscas algo mas.

Te diriges a la salida de la ciudad, a esa carretera de montaña que te gusta tanto, allí se te olvidan todos los problemas y disfrutas solo de lo que tienes que disfrutar, del paseo y tus pensamientos dentro del casco.

Ya has salido de la ciudad y paras la moto, puede que el dia este algo nublado, pero el asfalto esta seco y tiene buen agarre, esto promete.

Reajustas de nuevo todo, las rodilleras del pantalón de cordura, las protecciones de la chupa, el casco y los guantes, estamos listos.

Cuando engranas primera esta vez suena diferente que en el garaje, ahora suena a… no lo se, pero suena muy bien. Arrancas, tirando de toda la potencia aceleras hasta cerca de la zona roja y la moto se retuerce en un intento de obedecer a lo que le pides, segunda y vuelta a retorcer, esta vez un poco menos por que la primera ya te ha imprimido una velocidad suficiente para encarar la primera curva que ya llega, antes de entrar tocas un poquito el freno y tumbas la moto hasta que notas que el suelo pasa bajo tu rodilla, muy cerca.

La primera curva siempre es un indicador de cómo te encuentras  para conducir, asi que intentas que vaya muy bien, ya se acerca el final y abres un poco mas el gas a medida que enderezas la moto, tercera, gas de nuevo y curva hacia el lado contrario, balanceas la moto hasta que la cambias completamente de lado y lo notas todo a la vez, el agarre del asfalto, el sonido del motor, la tracción de la rueda trasera, la presión en la pantalla de tu casco es mayor ahora pero no molesta, te sientes desbordado por todas estas sensaciones tan agradables,  seguro  que hoy lo pasaras genial, cada dia encima de tu moto es algo nuevo que te aleja de la rutina vital que te rodea en tu trabajo, o en tu casa, estas sencillamente VIVO.